Revitalizar el control de armamentos
La erosión del control de armamentos, las maniobras militares imprevistas y los enfrentamientos militares, son actividades peligrosas que generan incertidumbre en el ámbito de la seguridad europea.
La Jornada de la Seguridad de la OSCE, organizada por su Secretario General, Lamberto Zannier el 3 de octubre en Viena, impulsó un diálogo integrador, extremadamente necesario, sobre esas cuestiones. Delegados de la OSCE y expertos en seguridad hicieron propuestas concretas para prevenir y gestionar incidentes militares, reforzar las respuestas multilaterales a las crisis y reducir los riesgos. También debatieron la reciente petición del Presidente en Ejercicio, Frank-Walter Steinmeier, de que se revitalizara el control de armamentos en Europa.
Patricia Flor
Comisaria de Desarme y Control de Armamentos del Gobierno Federal de Alemania
Iniciar un diálogo estructurado
“He escuchado a muchos decir que la seguridad europea no goza actualmente de buena salud. Tenemos conflictos híbridos, tenemos enfrentamientos militares, tenemos maniobras en gran escala que cogen por sorpresa a otros Estados. Por tanto, hay que hacer algo acerca del entorno de seguridad europeo. También he oído a muchos puntualizar lo que eso significa: trabajar para actualizar el Documento de Viena, que trata del fomento de la confianza, de la transparencia y de realizar inspecciones; y trabajar para modernizar el régimen de Cielos Abiertos, que permite a los Estados miembros sobrevolar el territorio de otros Estados, para estar mejor informados de lo que está ocurriendo allí. Pero también significa observar los instrumentos de control de armamentos convencionales y hacerse esta pregunta: ¿Cómo necesitamos adaptarlos a los retos actuales?
Hemos de empezar por observar las percepciones de amenazas, los temores que tienen los ciudadanos y las perspectivas de seguridad que nos ofrecen esos instrumentos. La propuesta del Ministro Steinmeier es que se inicie un diálogo estructurado precisamente sobre esas cuestiones.
Controlar los armamentos convencionales significa tratar de limitar las capacidades militares mediante un acuerdo marco mutuamente vinculante. Convendrán conmigo en que, llegados a un cierto punto, no tiene sentido seguir incrementando las capacidades: más armas, más carros de combate, más armamento militar. Tenemos que encontrar un área de interés común en Europa, en la que podamos decir: vamos a fijar ciertas reglas, ciertos acuerdos, limitaciones, umbrales, medidas de transparencia y medidas de verificación. Creemos que, en última instancia, eso incrementará la seguridad en Europa para todos nosotros. Pero va a ser difícil”.
Alexander Grushko
Representante Permanente de la Federación de Rusia ante la OTAN
Tenemos que hablar
“Hoy hemos tenido un sincero intercambio de opiniones sobre los instrumentos que deberíamos utilizar para mejorar la tensa situación actual de la seguridad, abordando inquietudes militares concretas producidas por la intensificación de las actividades militares en distintas partes del continente europeo. Consideramos que esos debates son muy importantes. También hay que hablar de la necesidad de invertir la tendencia general de la seguridad europea, que es muy negativa. La actividad militar de la OTAN en su flanco oriental y la conversión de la región báltica en una zona de rivalidad militar, han deteriorado gravemente la situación. No basta con observar solo los instrumentos consagrados en el Documento de Viena; confiamos en que la OTAN cambie por completo su política. Creo que la OSCE es el foro adecuado, todos estamos en pie de igualdad, cada delegación puede plantear cualquier tipo de cuestión, la OSCE posee gran cantidad de herramientas e instrumentos pertinentes.
El control europeo de armamentos es como una bicicleta caída. Cuando usted tiene un proceso basado en instrumentos jurídicamente vinculantes, con todos los formatos necesarios para abordar cuestiones concretas, es fácil basarse en él. Pero la maquinaria del control de armamentos en Europa se ha parado, porque los países de la OTAN no han ratificado el Tratado de Fuerzas Armadas Convencionales en Europa (FACE) adaptado, como hizo Rusia en 2004. El antiguo Tratado FACE ya no es adecuado y la versión adaptada ha quedado obsoleta. Quizá esa sea una de las razones por las que Alemania llegó a la conclusión de que había llegado el momento de relanzar los debates fundamentales sobre la función que desempeña el control de armamentos en el nuevo entorno de seguridad europea.
Durante muchos años, la seguridad en la parte central de Europa se basó en la moderación. Estábamos trabajando para crear una asociación estratégica con la Unión Europea, por ejemplo, tratando de establecer relaciones constructivas con la OTAN ayudando a la ISAF en Afganistán. El proyecto de mayor envergadura para luchar contra el tráfico de drogas provenientes de Afganistán se llevó a cabo bajo los auspicios del Consejo OTAN-Rusia; juntos impartimos formación a 4.000 funcionarios de Afganistán, Pakistán y países de Asia central.
Hoy la situación ha cambiado drásticamente. La OTAN ha suspendido todos los proyectos concretos de cooperación. Algunos informes de expertos dicen que si Rusia no ha invadido los Estados Bálticos es solo porque la OTAN tomó la decisión de desplegar batallones en dichos Estados. Si eso es lo que piensan, están muy equivocados. No obstante, el verdadero problema es que la planificación militar está basada en ideas equivocadas”.
Alexander Vershbow
Secretario General Adjunto de la OTAN
Tenemos enfoques discrepantes
“Mientras Rusia no esté dispuesta a poner fin a la agresión contra su Estado soberano vecino, Ucrania, se mantendrá la suspensión de la cooperación práctica de los últimos años en el marco OTAN-Rusia. La aplicación de los Acuerdos de Minsk sería un avance importante en la situación de estancamiento actual. Pero Crimea sigue siendo objeto de una anexión ilegal y eso no se resolverá de la noche a la mañana; podría tardar años, o incluso decenios.
No obstante, seguimos hablando con los rusos en Bruselas. La transparencia y la reducción de riesgos han sido algunas de nuestras prioridades (al menos para hallar formas de alejarnos del precipicio). Habrá que remitir las cuestiones a los foros adecuados para mantener negociaciones y la OSCE encabeza la lista.
La seguridad aérea es otra cuestión en la que puede haber algunos avances alentadores, basados en la labor realizada por los Estados bálticos, incluida Rusia, para reforzar la previsibilidad en la gestión del tráfico aéreo civil y militar. Los incidentes de carácter militar y no militar son consecuencia, en muchos casos, de elecciones deliberadas de la Federación de Rusia para generar tensiones, enviar mensajes intimidatorios, e incluso establecer esferas de influencia que, a nuestro parecer, ya no son propias del siglo XXI.
Tenemos enfoques discrepantes sobre la forma en que se debe construir la seguridad europea. Pienso que en la OTAN y en la mayor parte de Europa, creemos en los principios del Acta Final de Helsinki y respetamos la soberanía de todos y cada uno de los Estados. Rusia quiere volver a una especie de Yalta-2, basada en esferas de influencia. Hasta que todos volvamos al mismo espacio, hemos de ser realistas (no fatalistas sino realistas) acerca de lo que podemos hacer en el aspecto técnico.
En lo que respecta a la actualización del Documento de Viena, se han presentado algunas propuestas de diferentes países aliados sobre la reducción de umbrales para notificaciones de maniobras y la reducción de umbrales donde se requieran inspecciones obligatorias, con objeto de reducir, o prácticamente eliminar, las lagunas que permiten a Rusia llevar a cabo maniobras imprevistas ilimitadas de hasta 100.000 efectivos sin ningún tipo de notificación. Polonia ha presentado propuestas sobre algunas disposiciones relativas a actividades militares peligrosas.
En realidad, Rusia solía estar a favor de muchas de esas cosas. Es un poco trágico en mi carrera que a menudo ambas partes tengan la misma postura, pero no al mismo tiempo. Confiemos en que Rusia comprenda que redunda en su propio interés restablecer parte de la previsibilidad que el Documento de Viena debía proporcionar, para actualizarlo y adaptarlo a las nuevas y más difíciles condiciones actuales”.
Más información:
“Más seguridad para todos en Europa: Un llamamiento para relanzar el control de armamentos”. Artículo del Presidente en Ejercicio de la OSCE y Ministro de Asuntos Exteriores de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, publicado el 26 de agosto de 2016 en el Frankfurter Allgemeine Zeitung: www.osce.org/cio/261146 (en inglés y alemán)
Jornadas de la Seguridad de la OSCE: www.osce.org/sg/secdays
Construyendo una Comunidad
Tu Opinión
Agradecemos tus comentarios sobre asuntos de seguridad. Los comentarios seleccionados serán publicados. Envía tu opinión a: [email protected].
Aportaciones
Agradecemos aportaciones sobre aspectos político-militares, económicos y medioambientales o de seguridad humana. Los textos recibidos pueden ser editados. Contacte con [email protected]